El cáncer de colon afecta cada año a 1.200 personas en nuestro país

Una de las enfermedades que han tomado fuerza y preocupan actualmente es el cáncer de colon. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta afección se posiciona como el tercer tipo de cáncer más común y constituye la segunda causa de muertes asociadas a esta enfermedad a nivel global. Esta realidad no es ajena a Ecuador, ya que su incidencia es significativa, con aproximadamente 1.200 nuevos casos reportados cada año por SOLCA.
El cáncer colorrectal se origina en el intestino grueso o en el recto, y se desarrolla a partir de crecimientos anormales de células en la mucosa, conocidos como pólipos. Con el tiempo, algunos de estos pólipos pueden volverse cancerosos si no se detectan y tratan a tiempo. Además, los síntomas pueden variar, desde cambios en los hábitos intestinales, sangrado rectal, dolor abdominal persistente y pérdida de peso inexplicable.
De igual manera, esta afección puede atacar a personas de cualquier edad, aunque tiene mayor incidencia en la edad adulta, la mayoría de casos diagnosticados en pacientes de 50 años o más, menciona La Dirección Médica de Laboratorios Bagó.
No obstante, para prevenir el cáncer de colon, es fundamental adoptar medidas de estilo de vida saludable.
● Seguir una dieta rica en fibra, frutas y verduras, limitar el consumo de carnes rojas procesadas y grasas saturadas.
● Mantener un peso saludable y realizar por lo menos 30 minutos de actividad física diaria, como recomienda la OMS (Organización Mundial de la Salud).
● Evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco.
● Se recomienda someterse a pruebas de detección precoz, como la colonoscopia, especialmente a partir de los 50 años o antes si hay antecedentes familiares de la enfermedad.
La prevención y la detección temprana son fundamentales en la lucha contra el cáncer de colon, y cada individuo tiene un papel importante en su propia salud al tomar medidas preventivas y estar atento a cualquier síntoma que pueda indicar la presencia de esta enfermedad. Es recomendable el consumo de probióticos, especialmente bifidobacterium.