El calcio es, seguramente, uno de los minerales más importantes que el cuerpo necesita para realizar sus funciones. Según estudios de la IOF (International Osteoporosis Fundation), los países latinoamericanos, entre ellos Ecuador, están entre los de menor consumo de calcio a nivel mundial con un promedio de ingesta de 300 a 400 gr. al día. Asimismo, datos de la IOF, también indican que, en Latinoamérica, 1 de cada 3 mujeres mayores a 50 años pueden sufrir fracturas debido a la falta de calcio en sus huesos. Después de una fractura, se estima que el 40% de las mujeres pierden movilidad. Esto pone en duda el conocimiento que la población tiene sobre la importancia de consumo de calcio y el papel que juega en la salud ósea.

La principal interrogante que surge al momento de consumir calcio son las cantidades requeridas para cada persona. Para Katherine Cires, directora médica de Laboratorios Pharmabrand, sin importar la edad, la condición física o el género, el consumo de calcio es indispensable y obligatorio, a pesar de que varíe la cantidad según estas condiciones. “Pensar que ingerir 1 vaso de leche al día es suficiente es un mito a romper, un adulto promedio (de 19 a 50 años) requiere una cantidad de 1000 mg. de calcio al día, lo que equivale a más de cuatro vasos de leche diarios” sostiene la experta.

En este sentido, los lácteos y sus derivados son la principal fuente de calcio. Sin embargo, no es la única opción, lo que es una excelente noticia para los veganos y quienes tienen problemas de ingerirlos, las verduras frescas (brócoli, berro), el fréjol, garbanzo, las sardinas, el tofu, los frutos secos, leches de coco, almendras son algunos alimentos que contienen alto contenido de calcio. Otro mito a romper es considerar que la ingesta de colágeno reemplaza a la de calcio. Según la especialista, es importante conocer que los huesos no son órganos estáticos, ya que se remodelan constantemente, el 70% del hueso está formado por calcio y el 30% por colágeno y otros minerales. Entonces, el calcio le otorga al hueso la fuerza y la resistencia que éstos necesitan, sino se vuelven frágiles, porosos y propensos a osteopenia u osteoporosis.

Durante toda la vida del ser humano, el hueso está en continua remodelación formando nuevos huesos y reabsorbiendo el ya formado para entregar calcio a la sangre. Sin embargo, a partir de los 35 años, este proceso se ralentiza e inicia una pérdida permanente e irreversible de la masa ósea, lo que se hace aún más necesaria la ingesta adecuada de calcio o de suplementos de calcio para evitar que el hueso se vuelva frágil y correr riesgo de osteoporosis. Esto rompe el mito de si es necesario el calcio a mayor edad, sostiene la doctora Cires. Finalmente, cuando no se obtiene suficiente calcio y vitamina D en la dieta diaria, un suplemento alimenticio puede ser un buen aliado para complementar las cantidades necesarias que requiere nuestro cuerpo. En particular, existen opciones que combinan esta vitamina con citrato de calcio, -sustancia que se absorbe adecuadamente con o sin el consumo de alimentos y que no está relacionada con la producción de litiasis (cálculos) ni provoca estreñimiento-, un ejemplo es CALCID D FORTE, que contiene la cantidad adecuada de la mejor sal de calcio, citrato de calcio 1500mg y la cantidad ideal de Vitamina D 800 UI.