Cómo afecta la contaminación del aire en el organismo

La evidencia científica está demostrando que la contaminación del aire contribuye significativamente a una serie de problemas de salud. La Dra. Balakrishnan es la autora principal de una revisión exhaustiva publicada en Chest, basada en evidencia, centrada en los efectos del cambio climático y la contaminación atmosférica en todo el espectro de los trastornos pulmonares.
La contaminación del aire puede afectar la funcionalidad pulmonar, desencadenar asma y exacerbaciones de la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), además de aumentar el riesgo de infecciones respiratorias y cáncer de pulmón. Los principales componentes de la contaminación del aire son: Dióxido de nitrógeno (procedente de la combustión de combustibles fósiles), el ozono (debido al efecto de la luz solar sobre el dióxido de nitrógeno y los hidrocarburos), monóxido de carbono, contaminación atmosférica por partículas (partículas sólidas o líquidas en suspensión), óxidos de azufre.
Efraín Sánchez, neumólogo de IECED, señala que la contaminación del aire exterior es un factor importante que contribuye a la contaminación del aire interior. Además, de la contaminación que causa los recintos cerrados que incluye el humo del tabaco, la cocina (incluidas las cocinas de gas), la construcción y la rehabilitación. La quema de combustible de biomasa (por ejemplo, madera, residuos animales, cultivos) para cocinar y calentar es una fuente importante de contaminación, entre otros.
“Las temperaturas más cálidas provocan un aumento de los contaminantes y los alérgenos. La mala calidad del aire reduce la función pulmonar, aumenta el riesgo de complicaciones asmáticas, infartos de miocardio, insuficiencia cardiaca y muerte. La contaminación atmosférica y los alérgenos son las principales exposiciones que afectan a la salud pulmonar y cardiaca en este clima cambiante«, expresó Sánchez.
Una investigación británica de 2018 (T Whyand et al) encontró evidencia para evitar enfermarse a pesar de la contaminación, al usar carotenoides, la vitamina D, la vitamina E y la vitamina C, entre otros, pueden proteger contra ciertos daños. El consumo de frutas y vegetales y la adherencia a una dieta mediterránea tiene un efecto benéfico en la respuesta inflamatoria y en la función pulmonar.
La radiología juega un papel importante en el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades, para visualizar y evaluar el estado de los órganos y tejidos del cuerpo. Se ha demostrado que mejorar la calidad del aire a largo plazo mejora la función pulmonar, lo que induce a implementar estrategias para reducir la contaminación atmosférica, preservar la salud pulmonar, prevenir el desarrollo de EPOC y evitar el empeoramiento de los que ya la padecen.