Consejos de seguridad y salud para los trabajadores
Hoy se celebra el Día del Trabajo de una forma diferente en el mundo, para las empresas ahora resulta imprescindible asumir nuevos retos y trabajar en aplicar y/o reforzar estándares de seguridad y salud para evitar contagios y precautelar la salud entre sus colaboradores y familiares, frente al COVID-19. Durante esta pandemia sanitaria, la información es primordial: Compartir a los trabajadores y su entorno reglas y recomendaciones basadas en conocimientos científicos, promover el acceso a fuentes oficiales para que se mantengan informados y reforzar el conocimiento sobre métodos de contagio, síntomas y signos de la enfermedad.
“El peligro es ajeno al ámbito de trabajo, pero el riesgo de contagiarse depende de las medidas de prevención que apliquemos. La primera clave es la anticipación para que los protocolos y medidas de prevención sean implementadas antes y al momento de retornar a las actividades. La segunda clave es la información y capacitación al personal, ya que un factor significativo de motivación es el no contagio del entorno familiar. Cada empleado debe adaptarse a las nuevas reglas definidas por la empresa para evitar la propagación del virus en el trabajo”, comentó Xavier Bonhommeau, gerente de Seguridad y Salud de Unacem Ecuador.
La relación entre trabajo y salud está estrechamente ligada. La actividad laboral es un excelente medio para desarrollarse, alcanzar metas, reconocimientos y satisfacciones; sin embargo, también encontramos riesgos como accidentes o posibles enfermedades ocupacionales que pueden afectar a las personas en ámbitos físicos, psicológicos y emocionales. La responsabilidad en cuestión de seguridad es de empresarios y trabajadores. Las empresas que cuentan con un programa de capacitación en seguridad y un buen desempeño saben que el éxito depende, en gran medida, del factor humano. Unacem Ecuador ha trabajado más de 10 años en fomentar una cultura de seguridad a través del empoderamiento de sus trabajadores, mediante acciones como estas:
● Promover y reconocer los esfuerzos proactivos en seguridad y salud de los trabajadores.
● Incentivar el sentido de urgencia en la corrección inmediata de las desviaciones de seguridad encontradas.
● Favorecer la participación de todos los niveles de la organización mediante la asignación de responsabilidades.
● Evitar una cultura del miedo para que el personal se sienta en confianza para hablar de seguridad y salud, negarse a realizar actividades inseguras y reportar situaciones mejorables.
● Finalmente, y como último recurso, sancionar las faltas graves. Para Bonhommeau, la seguridad industrial debe ser una prioridad.
En la coyuntura de la pandemia por COVID-19, un buen liderazgo en seguridad y salud ocupacional permitirá fomentar una cultura de disciplina y que cada empleado tome sus propias precauciones, no solo pensando en él mismo sino también en sus compañeros y familiares.